El Freedom Day no lo será tanto para Boris Johnson. El primer ministro británico, ha sido un contacto estrecho de un caso de covid-19 y deberá aislarse en vísperas del levantamiento casi total de las restricciones en Inglaterra. La cuarentena de Johnson, sin embargo, será parcial. Solamente tendrá que aislarse mientras no esté ejerciendo sus responsabilidades al estar participando en un programa piloto de testeo diario que le permite continuar trabajando durante el proceso.
Así lo ha anunciado este domingo Downing Street una vez confirmado el positivo del ministro de Salud, Sajid Javid.
El levantamiento de las medidas restrictivas en Inglaterra ha suscitado críticas ante las alarmantes cifras de infecciones diarias provocadas por la variante delta, predominante y muy contagiosa. A pesar de ello, Johnson insistió el jueves en augurar que es «muy probable» que «lo peor de la pandemia haya quedado atrás» en el Reino Unido al considerar que el éxito del plan de vacunación contrarresta el avance del virus.
A partir de mañana, en Inglaterra dejará de ser obligatorio llevar mascarilla, mantener la distancia social o respetar el límite de aforo en reuniones en interiores o al aire libre. Una decisión recibida con alarma y escepticismo entre la comunidad científica internacional.
De hecho, los científicos rechazan el argumento de reabrir «ahora o nunca» porque consideran que, con una transmisión alta del virus y una parte importante de la población todavía sin vacunar, todavía no ha llegado el momento para volver a la normalidad.
«El final de las medidas acelerará los contagios y hará de Inglaterra caldo de cultivo para la aparición de nuevas mutaciones», ha advertido Christina Pagel, miembro de SAGE, un grupo de expertos independiente que brinda asesoramiento al Gobierno británico.
Fuente:lavanguardia.com
