La polémica por el festejo de cumpleaños de Elisa Carrió, en plena cuarentena y junto a 70 personas, sumó un nuevo capítulo con la intervención del intendente de Exaltación de la Cruz (municipio donde se desarrolló el evento), Diego Nanni, que echó por tierra uno de los argumentos de la lider de la Coalición Cívica.
Tanto Elisa Carrió como Mario Negri, referente de la UCR cordobesa y jefe del interbloque de Juntos por el Cambio en diputados, afirmaron que el festejo tenía el visto bueno de Nanni, quien lo destimintió desde sus redes.
Fue a partir de una intervención de Aníbal Fernández, haciéndose eco de declaraciones públicas de Negri y de Carrió. «Cuando vi la foto me dieron ganas de llorar, son unos canallas, todos estábamos hisopados, fue al aire libre y conté con autorización de la intendencia», de victimizó Carrió en declaraciones a TN.
Aníbal Fernández no la dejó pasar. «Un acto administrativo particular (existe?, fue verbal o escrito) ¿puede dispensar el cumplimiento del DNU?», se preguntó. Luego, dirigiéndose al intendente Nanni preguntó directamente: «¿Ud. autorizó por acto administrativo a la realización del cumpleaños de Carrió?».
Nanni recogió el guante en la misma red. «No es procedente el argumento de la «consulta» al intendente local, sino que se trató de una comunicación acerca de una pequeña reunión íntima, y no una con 70 personas. Exaltación no estaba ‘liberada'», respondió.
Luego agregó que en las fotos que trascendieron del festejo «(no) se verifica cuidado de distanciamiento y uso de tapaboca».
Lo cierto es que a pesar de las amenazas contra periodistas que no se ciñan al relato de la Coalición Cívica sobre el festejo, queda cada vez más claro que el festejo se desarrolló por fuera de los protocolos y en violación a la reglamentación vigente en su momento. Y complica la autoridad de la oposición para hablar del cumpleaños de Olivos. (https://infocielo.com)