Las fuerzas de seguridad mexicanas han rescatado a 327 migrantes hacinados y «en condiciones infrahumanas» en una vivienda del estado de Nuevo León, en el centro de México, según el Instituto Nacional de Migración (INM), que ha confirmado al menos 120 niños y adolescentes entre estos extranjeros.
La casa, situada en el municipio de Cadereyta, fue localizada a partir de una pista de la Agencia Estatal de Investigaciones, que comenzó a seguir el caso de un paciente fallecido en un hospital de la localidad y que recibía visitas de personas extranjeras.
Finalmente, localizaron el martes a primera hora la vivienda, por lo que dieron aviso al INM para que realizase el correspondiente registro. En el operativo también participaron efectivos de la Policía Municipal, la Fuerza Civil y la Guardia Nacional (GN), según el comunicado oficial.
Los migrantes se encontraban hacinados, sin agua ni alimentos, hasta el punto de que sus vidas corrían peligro. El INM, dependiente del Ministerio de Gobernación (Interior), ha prometido que seguirá trabajando para evitar casos como este, con «atención especial a grupos vulnerables».
AUMENTO DE LOS MENORES
Más de un tercio de los migrantes rescatados en Cadereyta eran menores de edad, lo que concuerda con el repunte detectado por las autoridades. Desde principios de año, el INM ha detectado a más de 34.000 niños y adolescentes migrantes, tres veces más que el año pasado, y de ellos unos 8.500 viajaban sin ningún acompañante adulto, procedentes sobre todo de Honduras, Guatemala y El Salvador.
Las entrevistas realizadas a los migrantes evidencian que son los propios traficantes los que recomiendan viajar con menores, ya que esto exime de quedar alojados en centros migratorios u otras estancias provisionales en virtud de los cambios de la Ley de Migración que entraron en vigor en enero.
Asimismo, también les prometen una supuesta amnistía en la frontera de Estados Unidos que sería especialmente laxa para los migrantes que viajan con niños y adolescentes, según el INM.
Fuente:europapress