Texto por:Ramiro Cué Barberena
Los dos gigantes del norte africano incrementan sus rispideces luego de la decisión tomada desde Argel en un nuevo capítulo del conflicto diplomático entre ambos países, una historia que data de largo tiempo y que incluye falta de apoyo en el Sahara Occidental, acusaciones de incendios forestales y la negativa a renovar un gaseoducto. Desde Rabat responden con silencio, asegurando que las nuevas medidas no afectarán al turismo.
El pasado miércoles 22, Argelia realizó el anuncio del cierre del espacio aéreo para todos los aviones civiles y militares de Marruecos, un hecho que agrega más tensión en la relación diplomática entre las dos naciones del norte de África. El Alto Consejo de Seguridad argelino se justificó alegando “continuas provocaciones y prácticas hostiles del lado marroquí”.
Este suceso se genera solamente un mes después de que Argelia formalizara la ruptura de los lazos diplomáticos, una decisión previsible posteriormente a que los dirigentes marroquíes entablaron nuevamente sus relaciones con Israel y maniobraron para desterrar negociaciones en el Sahara Occidental que no comprendieran nítidamente la soberanía de Marruecos en la zona.
Las rispideces entre los dos países más influyentes de la región norteafricana añaden episodios que distan de encontrar un final pronto.
Argelia y una decisión fundamentada en los “agravios” marroquíes
El anuncio del cierre del espacio aéreo para el país del este significó una respuesta a las actitudes de Marruecos. Al cese formal de los lazos diplomáticos y el estrecho contacto con Israel antes mencionado, Ramtam Lamamra -el ministro argelino de Asuntos Exteriores- añadió maltratos del pasado como “la profanación de la bandera en Casablanca”, en 2013.
En cambio, otras fueron más actuales como la postura favorable del embajador de Marruecos ante la ONU hacia la causa independentista sucedida en Cabilia, región situada en las montañas argelinas donde la mayoría de sus ocupantes son bereberes.
En el comunicado, Lamamra también hizo referencia a la visita del último 11 de agosto de Yair Lapid –homólogo israelí- a Rabat, donde criticó duramente al régimen en Argel. A su vez, aseguró que esta decisión fue tomada por el presidente de la República, Abdelmedjid Tebboune, luego de recibir un informe del Alto Consejo de Seguridad, donde incluye el apoyo marroquí a dos grupos opositores que en Argelia son considerados grupos terroristas.
En Marruecos bajan el precio a las decisiones argelinas sobre el espacio aéreo
El silencio reina en Rabat luego de los anuncios realizados por su vecino del este que impedirán volar aviones de matrícula marroquí, sean civiles o militares. Oficialmente no han querido pronunciarse para no continuar con la escalada de tensión.
Sin embargo, aseguran que estas medidas tomadas por el Gobierno de Argelia no afectarán al turismo, uno de los eslabones más fuertes de la nación. Royal Air Maroc, la aerolínea estatal marroquí, deberá buscar rutas complementarias para algunos destinos como Túnez, Egipto, Turquía y Mali. Eso le sumará tiempo suplementario a alrededor de apenas 15 vuelos semanales, algo que la compañía puede sobrellevar.
El voto de silencio optado por Marruecos hacia Argelia nació cuando, deliberadamente, este último decidió cortar los lazos diplomáticos. Desde la nación del oeste consideraron esta actitud como “injustificada, pero esperable”.
Argelia, Marruecos y una tensa conexión de décadas
La discordia entre ambos países, cuya frontera terrestre está cerrada desde 1994, tiene como piedra angular la causa nacional marroquí en el Sahara Occidental. El Gobierno argelino resguarda en su territorio a sus pares saharauis y sus campamentos de refugiados.
Sin embargo, no hay que retroceder tanto en el tiempo para referirse a la tirante relación. El 31 de julio, días previos al anuncio del final de relaciones diplomáticas, Marruecos tuvo un acercamiento ofreciendo aviones para apagar los incendios forestales en Argelia. Estos ignoraron la oferta y redoblaron la apuesta al acusar a Marruecos por el fuego.
También achacaron a Rabat el apoyo al movimiento independentista en la región de Cabilia. Tras la ruptura de relaciones, desde Argel informaron que no renovarán el acuerdo para la exportación de gas a España por el gasoducto que tiene su origen en el desierto argelino y atraviesa Marruecos.
Esta tubería, una de las fuentes esenciales para el suministro energético en España y la Unión Europea, le proporcionaba a Rabat un 7% del valor del gas que pasaba a la Península ibérica.
Con EFE y Reuters
Fuente:france24