Trabajadores estatales de la ciudad de Buenos Aires realizaron una clase pública frente a la sede del Gobierno porteño, junto a los gremios ATE, UTE y de los Metrodelegados, para exigir la actualización de las asignaciones familiares, que «se encuentran congeladas desde hace 12 años», indicaron fuentes gremiales.
Durante este acto, que se realizó sobre la calle Uspallata al 3100 y se transmitió por streaming a través de las redes sociales gremiales, los dirigentes presentaron un pizarrón para graficar la situación actual de la asignación familiar que perciben los trabajadores del sector.
Desde los gremios aseguraron que aquellos docentes que trabajan jornada simple o hasta 20 horas cátedra, cobran $3050 de asignación, y a medida que suman años de antigüedad o mayor cantidad de horas cubiertas por semana, la asignación se reduce hasta llegar a $270.
«Los trabajadores de la educación tenemos todos más de un cargo», aseguró Angélica Graciano, docente y secretaria general de UTE durante el acto.Y denunció que los docentes y directivos de los colegios «aportamos de nuestro salario» para la compra de materiales didácticos y «nunca lo recuperas».
«Estamos cobrando $270 de salario familiar desde el 2012, los únicos que tienen un régimen especial es el Poder Judicial que cobran $1700 de salario familiar, porque consiguieron que los saquen del régimen de administración pública», explicó la dirigente sindical. (Telam)
