Texto por:Andrea Amaya Porras
Gremios, comités cívicos y opositores al Gobierno del presidente Luis Arce manifestaron este 11 de octubre en distintas ciudades bolivianas en rechazo de la denominada ley Contra la Legitimación de Ganancias Ilícitas, Financiamiento Contra el Terrorismo y Financiamiento de la Proliferación de Armas de Destrucción Masiva. Por su parte, la Central Obrera Boliviana anunció una protesta este martes en contra de los “intentos desestabilizadores de la derecha”.
Este lunes 11 de octubre se registraron multitudinarias manifestaciones en Santa Cruz, La Paz, Cochabamba y otras más pequeñas en ciudades como Oruro, Potosí, Tarija y Sucre.
Los diferentes movimientos cívicos que convocaron a los manifestantes se movilizaron en protesta por la normativa Contra la Legitimación de Ganancias Ilícitas, Financiamiento Contra el Terrorismo y Financiamiento de la Proliferación de Armas de Destrucción Masiva.
Durante la jornada hubo bloqueos del transporte, enfrentamientos con las autoridades y hasta gas lacrimógeno tuvo que ser dispersado en la multitud con el fin de retirar a los manifestantes.
El polémico proyecto de ley de ganancias ilícitas en Bolivia provocó diferentes posiciones y rechazo entre la oposición, ya que cree que dará poderes especiales a instancias del Estado para empezar una persecución política, mientras que otros piensan que se trata de exigir “justicia”.
En contrapartida, varios sectores afines al gobernante Movimiento al Socialismo (MAS) realizarán este martes lo que llamaron un “wiphalazo”, en referencia a la bandera indígena Wiphala, para marchar en “defensa de la democracia” y del Gobierno del presidente Luis Arce.
El Gobierno izquierdista vs. la oposición
Grupos afines al Gobierno de Arce definieron el paro de este lunes como un “perjuicio a la economía”, responsabilizando al gobernador de Santa Cruz, el opositor Luis Fernando Camacho, y a los comités cívicos del caos que hubo en esta ciudad, que fue donde más se sintió el paro.
Estefanía Morales, jefa de bancada del MAS-IPSP en Diputados, dijo a la Agencia Boliviana de Información que el paro convocado por Camacho y cívicos cruceños, fue un “total fracaso a nivel nacional”.
En cuanto al proyecto de ley contra la legitimación de ganancias ilícitas, la diputada aseguró que éste no afecta a gremialistas, periodistas, carniceros o congregaciones evangélicas, como se había rumorado en días pasados.
Los críticos del proyecto de ley consideran que este dará poderes especiales a diferentes instancias del Gobierno para desarrollar una persecución política y, además, dicen que vulnera cláusulas de confidencialidad o el secreto profesional en varios sectores.
Pero, según el diario La Razón, “dicho temor fue provocado por una intensa campaña de desinformación sobre los alcances del proyecto de ley, que tuvo como contraparte, otra vez, una muy limitada capacidad informativa del Gobierno”.
Por su parte, el Gobierno boliviano insiste en que la legislación busca cumplir estándares internacionales contra el enriquecimiento ilícito y que, en el caso del secreto de fuente en los medios de comunicación, no se verá afectado.
Desde que Luis Arce llegó a la Presidencia de Bolivia en noviembre de 2020, la guerra ha sido declarada entre el aliado del expresidente Evo Morales y los movimientos de oposición, derrotados en las elecciones generales del año pasado. El Gobierno izquierdista no ha dudado en tildar el paro de este lunes como un intento de sus oponentes para desestabilizar la gestión de Arce, quien dijo que sus adversarios buscan crear condiciones “para un golpe de Estado”.
Con EFE y medios locales
Fuente:france24