Una amenaza de muerte. A través de un video publicado en las redes sociales quien es presuntamente alias Lamo Sanjou, líder de la pandilla haitiana 400 Mawozo, afirmó que de no recibir el monto de dinero demandado por la liberación de los 17 miembros de un grupo misionero secuestrados desde el martes acabaría con sus vidas.
«Si no encuentro lo que necesito, estos estadounidenses, prefiero matarlos a todos, y descargaré un arma grande en la cabeza de cada uno de ellos», anunció el hombre por medio del video en el que sale portando un sombrero azul y una cruz en su cuello.
Según Reuters, no se pudo confirmar la veracidad del video ni la fecha de su elaboración. Sin embargo, en la grabación el hombre también amenazó al primer ministro haitiano, Ariel Henry, y al jefe de la Policía, León Charles, mostrando varios ataúdes en los que aparentemente estaban varios miembros de su banda asesinados.
A raíz del secuestro, Charles dimitió del cargo. Así lo dio a conocer el medio de comunicación local Le Nouvelliste, citando un anuncio del primer ministro en el que afirmaba que el jefe de la Policía le presentó “su dimisión”. Además, anunció que Charles sería reemplazado por el comisario e inspector general, Frantz Elbé.
Tras la dimisión, Elbé deberá hacerle frente a la grave situación de inseguridad a la que se había tenido que enfrentar Charles desde que llegó al cargo en el momento del asesinato del presidente Jovenel Moïse el 7 de julio.
El martes las autoridades haitianas informaron que la pandilla haitiana 400 Mawozo estaba exigiendo 17 millones de dólares por la liberación del grupo de misioneros de los cuales 16 son de nacionalidad estadounidense y uno canadiense.
El secuestro ocurrió en un viaje organizado por la organización de ayuda internacional sin fines de lucro, Christian Aid Ministries, con sede en Ohio. Y ha puesto en el panorama internacional la crítica situación que vive Haití por la cada vez mayor presencia de las pandillas en dicho territorio.
Los 400 Mawozo son solo una de estas. Los integrantes de la banda comenzaron como ladrones y que se han convertido en una de las pandillas más peligrosas de Haití, llegando, incluso, a controlar un área rural al este de la capital haitiana, Puerto Príncipe.
La alarmante situación de los secuestros en Haití
El secuestro del grupo de misioneros no es un caso aislado. También el martes la Oficina de Protección Ciudadana reportó el secuestro de un profesor universitario. El mismo organismo anunció en un comunicado que un pastor haitiano secuestrado a principios del mes tampoco ha sido liberado a pesar de que se pagó su rescate.
Por otro lado, UNICEF mostró que, en los ocho meses transcurridos, los secuestros ya superan los números del año pasado. Además, anunció que el peligro para las mujeres y niños es alarmante.
El director regional de UNICEF para América Latina y el Caribe, Jean Gough, dijo por medio de su cuenta de Twitter que: » Ya no hay ningún lugar seguro para los niños en Haití. Ya sea de camino a la escuela, en casa o incluso en la iglesia, las niñas y los niños corren el riesgo de ser secuestrados en cualquier lugar, en cualquier momento del día o de la noche. Esta es la peor pesadilla de un padre”.
Este año, 71 mujeres y 30 niños fueron raptados frente a las 59 mujeres y los 37 niños del año pasado.
La falta de combustible: otro componente de los reclamos de la ciudadanía en Haití
A la situación de inseguridad se le suma la falta de combustible, otro de los reclamos de los haitianos en las calles. Este jueves, manifestantes haitianos bloquearon las calles de Puerto Príncipe usando rocas y árboles como un llamado al Gobierno para encontrar una solución a la escasez de gasolina.
Las protestas fueron lideradas por motociclistas que denunciaron que no han podido trabajar por el desabastecimiento de gasolina. Además, se preveía que los camioneros del país también se manifestaran.
En Haití, muchas estaciones de servicio permanecen cerradas por falta de combustible. Situación que llevó al director ejecutivo de la empresa de telecomunicaciones Digicel Haití, a asegurar que 150 de sus sucursales no tienen diésel.
Según las autoridades, las pandillas también han afectado el suministro de gasolina al bloquear terminales de distribución de gas y atentar contra los camiones de suministro.
Con Reuters y AP
Fuente:france24