Texto por:Juan Pablo Lucumí
Las autoridades de Houston Texas afirmaron que “llegarán al fondo de esto”, asegurando que se inició una indagación para saber si se estaba inyectando droga de manera indiscriminada a los asistentes del concierto.
Una estampida generada durante el festival de música Astroworld en Houston dejó a 8 personas muertas y al menos una decena de heridos cuando el pánico se apoderó de la multitud de asistentes el viernes 6 de noviembre.
Después del suceso, las autoridades iniciaron una investigación criminal a cargo de detectives de homicidios y narcóticos tras recibir informes no confirmados sobre una persona del público que “estaba inyectando drogas a otras personas”.
“Tenemos un informe de un oficial de seguridad, de acuerdo con el personal médico que salió y lo trató anoche, que se estaba acercando para contener o agarrar a un ciudadano y sintió un pinchazo en el cuello”, explicó en una rueda de prensa el jefe de la policía de Houston, Troy Finner este sábado, quien añadió que “cuando lo examinaron, quedó inconsciente, le administraron ‘narcan’, fue reanimado y el personal médico notó un pinchazo similar al que se produce cuando alguien intenta inyectarse».
¿Un concierto lleno de imprudencias?
La tragedia se dio a las 21:30 horas del viernes en el NRG Park, mientras el rapero Scott Travis, cantante, productor y nominado a los Grammys, hacía su presentación principal. En ese momento, unos 50.000 asistentes se agolparon hacia el escenario y la gente empezó a perder el conocimiento. Algunos “aparentemente sufrieron de paros cardiacos”, explicaron las autoridades.
Testigos afirmaron que para la hora de la estampida ya se habían presentado varios actos de imprudencia generalizada y que habían experimentado ser pisoteados, aplastados y golpeados con botellas de agua que se lanzaron en repetidas ocasiones durante el día. «Tal vez solo había sonado una o dos canciones del set de Travis Scott cuando empezó el caos. Había demasiada imprudencia. Puertas, vallas, zonas VIP, todo estaba descontrolado, y aunque la seguridad empezó a seguir a la gente, no podía seguirle el paso a la estampida”, dijo uno de los testigos del evento, Albert Meza.
Sin embargo, no todos los asistentes vivieron esos momentos de terror. Algunas personas que estaban muy atrás de la multitud afirmaron “a duras penas darse cuenta” de las complicaciones en el evento.
“No sabíamos nada de las muertes ni de los heridos hasta que vimos las noticias al otro día y nos dimos cuenta que el espectáculo se había cancelado. Cuando terminó el concierto el viernes todo el mundo se fue y parecía que todo estaba bien, todo el mundo estaba cantando”, dijo Alex McLemore, de 26 años, asistente del evento en Dallas.
Travis Scott afirmó sentirse «absolutamente devastado»
Además de las ocho muertes confirmadas, al menos 300 personas fueron atendidas por lesiones. Entre ellas, 11 fueron trasladadas a hospitales tras sufrir de complicaciones cardiacas.
El subjefe ejecutivo de la policía de Houston, Larry Satterwhite se reunió inmediatamente con los promotores del evento, con quienes acordó suspender el espectáculo. El concierto se dio por terminado a las 22:10 horas.Scott, nacido Houston, dijo estar «absolutamente devastado» y prometió apoyar a la policía mientras investiga».
En los videos publicados en redes sociales se puede apreciar que en repetidas ocasiones Scott paró su concierto cuando vio a los fans en apuros y pidió a la seguridad que velara por el cuidado de todos. «Necesitamos que alguien nos ayude. Alguien se ha desmayado aquí», dijo Scott, según el vídeo difundido en internet. “Seguridad, que alguien salte aquí muy rápido», se le oye decir en el vídeo.
Catástrofes en eventos masivos de la última década
En noviembre de 2010 más de 340 personas murieron y cientos resultaron heridas en medio de una avalancha de pánico en un festival realizado en la capital de Camboya, Nom Pen. Tres años más tarde, un incendio se cobró la vida de más de 200 personas en la discoteca Kiss de Santa María en Brasil.
El 24 de septiembre de 2015, se estima que entre 700 y más de 2.000 peregrinos musulmanes murieron aplastados durante el hajj en Arabia Saudita. El más reciente, antes de la tragedia del concierto en Texas, se dio en el mes de abril cuando 45 personas murieron en un atropello por pánico en la peregrinación anual del Monte Meron en Israel.
Tan solo ace dos semanas, otro concierto en Houston fue cancelado después de que los fans empujaran en un espectáculo de Playboi Carti que se celebraba dentro del mismo complejo NRG Park.
Con Reuters y AP.
Fuente:france24