Texto por:Ramiro Cué Barberena
En medio de la tensión entre Belarús y Polonia por el gran flujo de civiles asiáticos que quieren ingresar a la Unión Europea, los refugiados sufren estafas y maltratos de delincuentes que les prometen hacerlos traspasar la barrera hacia suelo polaco. Entretanto, la OTAN se reunirá para analizar la respuesta de las acciones bielorrusas y de Rusia, que incrementó su presencia militar en el límite con Ucrania.
Europa padece una profunda crisis migratoria en distintos puntos del continente. A lo ocurrido esta semana en el Canal de la Mancha que involucra a Francia y Reino Unido, el conflicto entre Polonia y Belarús sigue escalando paulatinamente.
En estas horas, se conoció una siniestra metodología de traficantes de personas que buscan aprovecharse de la situación de ciudadanos sirios, iraquíes y afganos que pretenden acceder a la Unión Europea.
Según testimonios recogidos por la agencia Reuters, los contrabandistas aseguran hacer de intermediario de los migrantes con la promesa de que ingresar a Europa Occidental será sencillo y les cobran una tasa que oscila entre los tres mil y siete mil euros.
Sin embargo, los caminos que les indican están actualmente cerrados y son atrapados por la policía fronteriza de Polonia, la cual los devuelve a los campamentos que yacen en los bosques helados aledaños del lado de Belarús.
“Todos te llevan a caminos donde puedes morir, no les importa tu seguridad. Solo quieren el dinero”, narró a Reuters uno de los hombres sirios que padeció en carne propia esta situación. Algunos, por intentar cruzar la frontera ilegalmente, son trasladados a centros de detención polacos.
«Más personas se están dando cuenta de que han caído en una trampa y que lo que se les ha prometido es una mentira», manifestó Marysia Zlonkiewicz, activista de With Bread and Salt, una organización benéfica de Polonia.
Desde agosto, aproximadamente 314 contrabandistas fueron arrestados en territorio polaco, según indican los registros policiales. La mayoría son provenientes de Alemania, Suecia, Georgia y Ucrania.
La situación conflictiva del flujo migratorio ya lleva meses y, si bien actualmente aminoraron la cantidad de personas que hacen incursiones para meterse por la fuerza –de 500 pasaron a cerca de 200-, el Gobierno polaco y la Unión Europea apuntan contra Belarús de alentar y equipar a los refugiados como represalia por las sanciones a Minsk.
Polonia dispuso de más de 20 mil guardias fronterizos, soldados y policías en las zonas más cerradas. Por su parte, autoridades bielorrusas comenzaron a trasladar a grupos de migrantes para regresarlos a su país de origen.
Mientras, por presión de la Unión Europea, las aerolíneas bajaron la cantidad de vuelos desde Oriente Medio con destino a Belarús. Otras agencias dejaron de vender pasajes al país.
La OTAN se reunirá por Belarús y Rusia como temas principales
Esta semana, los ministros de Exteriores de los países miembros de la organización tendrán un cónclave en Riga donde figurarán las actitudes de sendos países como tópicos más urgentes en la agenda.
Preocupados por la seguridad de la Alianza, dialogarán por el aumento militar ruso a la vera de la frontera compartida con Ucrania y el aprovechamiento bielorruso de los migrantes.
Sin embargo, previamente habrá una rueda de prensa donde hablarán Jens Stoltenberg –secretario general de la OTAN- y Egils Levits –presidente de Letonia- después de haber visitado territorio letón y lituano junto a Ursula von der Leyen –presidenta de la Comisión Europea- con el fin de demostrar el apoyo a esos países, amenazados por el régimen bielorruso de Alexander Lukashenko.
En los últimos días Stoltenberg ya se había mostrado con Andrej Duda, presidente de Polonia, con la misma finalidad. Allí, aseguró que los migrantes son ayudados por militares de Belarús, que les facilitan armamento para hacer incursiones nocturnas.
En otro orden, la situación que empeoró fue la que compromete a Ucrania y su paso fronterizo con Rusia. En los últimos días se elevó la tensión al colocar mayor presencia militar en la zona de manera “inusual”, según catalogó Stoltenberg.
Este refuerzo ruso está conformado por armamento pesado como tanques, artillería, unidades acorazadas, drones y sistemas electrónicos. “Esta reacción no ha sido provocada y no tiene explicación”, aseguró el secretario general de la OTAN.
Stoltenberg instó a Rusia a “mostrar transparencia, reducir tensiones y desescalar” el avance armado. “No hay certidumbre sobre las intenciones”, cerró.
Con Reuters y EFE
Fuente:france24