La frustración de Paula Pareto en MasterChef Celebrity que terminó en llanto: “Todo me cuesta”

A la deportista la criticaron por no mantener el orden en su estación de trabajo y ella no lo soportó y explicó que sus logros se debían a la constancia y no a la velocidad

Una noche de mucho estrés se vivió en MasterChef Celebrity (Telefe). Este jueves, los participantes se vieron en la difícil tarea de preparar éclairs en tiempo récord. Para el jurado se trató de una consigna donde la disciplina era un actor clave. En el caso de Paula Pareto, la suerte no estuvo de su lado y no logró desempeñarse bien. Pese a que la deportista es muy comedida cuando recibe las devoluciones, en esta oportunidad estalló luego de escuchar su evaluación. “Mis logros en la vida han sido por perseverar”, expresó.

No obstante, la cocinera empezó el programa con una victoria. Antes de anunciar el desafío, Germán Martitegui, Damián Betular y Donato de Santispusieron a prueba las habilidades manuales de los concursantes y les presentaron una rosa hecha de pasta de azúcar que todos debían replicar.

Pese a que todos dieron lo mejor de su creatividad y astucia para acabar esta particular tarea, muchos no pudieron terminarla. En el caso de la yudoca sorprendió para bien porque resultó ganadora del llamado mini desafío.

Una vez que los concursantes comenzaron a cocinar, como ya es costumbre, los miembros del jurado pasaron por las distintas mesas de trabajo y no faltó la ansiedad de Betular cuando se acercó a las hornallas de Catherine Fulopy vio que la actriz no estaba muy a tono con la asignación.

Por otra parte, Martitegui le hizo un pedido especial a Pareto que la puso a prueba, pero que devino en más estrés para ella. La médica debió hacer el doble de éclairs que sus compañeros. Más adelante, cuando el jurado se reunió para conversar acerca de las preparaciones de cada famoso, los tres coincidieron en que Paula estaba trabajando de una manera sumamente desordenada.El estallido de Paula Pareto contra el jurado en MasterChef Celebrity (Telefe)

Cuando llegó el momento de la evaluación de los platos, la Peque fue la primera en pasar al frente para defender su preparación: éclairs con crema pasteleraacompañadas con pequeños trozos de frutillas y duraznos.

Los jurados probaron los dos platos de Paula sin decir una palabra, y aunque no dijo nada, se la veía bastante ansiosa. El primero en dar la devolución fue Betular, quien comenzó explicando que la cocción fue buena, pero no así la consistencia. Luego le siguió Donato, que se enfocó en decirle a la Peque quetomara nota de todas las correcciones que recibió esa noche.

Asimismo, cuando llegó el turno de Martitegui la felicitó por los sabores de su plato, pero destacó que “el desorden de su mesa era el peor caos del mundo”, y mientras continuaba escuchando, asentía con la cabeza dándole la razón al chef. Por último, añadió que el punto más débil de la yudoca era la presentación de la comida.

Luego de aquella devolución, Santiago Del Moro tomó la palabra para darle una crítica constructiva a la joven. “Peque, yo lo que noto es que hay mucha preparación detrás de los platos”, le dijo el presentador. La mirada de Paula cambió y sus ojos se cristalizaron, y con la voz entrecortada alcanzó a reconocer que le costaba mucho la presentación porque se trataba de algo totalmente nuevo para ella y todavía seguía tratando de conseguir un buen ritmo.

Del Moro notó la sensibilidad de Pareto y protagonizaron un emotivo momento al darse un abrazo. Tras cámaras, la deportista expresó que su éxito se debía a la disciplina y a la constancia. “Los logros que he tenido en la vida han sido por perseverar durante meses y años, y acá los cambios son muy rápidos para mí”, concluyó.

LA NACION