Rafael Nadal sorprendió con sus declaraciones luego de acceder a la final número 14 de Roland Garros. La confesión del tenista fue descarnada. Lo que refleja una vez más el padecimiento físico de muchos deportistas de élite. Un costo muy elevado y que el español describió de manera tajante: «Prefiero perder la final, pero tener un pie nuevo que me permita ser más feliz en mi día a día».
Nadal accedió a la instancia decisiva del torneo porque en la semifinal Alexander Zverev sufrió un fuerte esguince de tobillo que lo obligó a retirarse cuando el español había ganado el primer set por 7/6 y el segundo estaba igualado 6/6, en un partido de gran nivel y mucha emoción.
Pero más allá de la satisfacción por acceder a las puertas de otro título, Nadal en la rueda de prensa hizo una diferenciación que reveló el dolor físico que le impide estar en plenitud en su vida cotidiana: «Prefiero perder la final y tener un pie nuevo que me permita ser más feliz en mi día a día. Ganar es bonito y te llena de alegría momentánea. Pero la vida continúa y es lo más importante. Yo tengo una vida por delante y me gustaría jugar con mis amigos deporte amateur y esto ahora mismo es una incógnita».
Ya en cuanto a lo estrictamente deportivo, el notable tenista español reflexionó: «Es un sueño estar en la final, pero no quería estar de esta manera. Soy humano y lo siento por Alex Zverev, pero vengo haciendo todo para darme una oportunidad de estar donde estoy y de estar en la final de Roland Garros. Es un sueño hecho realidad que vale todos los sacrificios», expresó.
«Pero hay que ser realistas y asumo mis limitaciones actuales. Estar en una final es increíble y un éxito importante. Significa muchísimo estar en la final», cerró.
Fuente: La capital.