Tras un período de relativa calma el precio de la carne comenzó a moverse durante la segunda semana de octubre marcando un 1,1% de incremento promedio, un valor que aunque inferior al que mostraron Verdura (4,9%) y Frutas (2,3%) en el mismo período, traccionó al alza la inflación de la semana (1,6%) por su mayor peso relativo dentro de la canasta alimentaria.
Así lo estableció el Informe de Avance de la consultora LCG correspondiente a la segunda semana de octubre, que indicó que «Estacionales de Verduras y Frutas registraron los mayores aumentos. Pero Carnes, con menor aumento relativo, traccionó la inflación de la semana».
Con el impulso de la carne la suba de precios de los alimentos promedió 1,63% en la semana. «Alimentos y bebidas presentó una inflación mensual del 8,3% promedio en las últimas 4 semanas y 8,6% punta a punta en el mismo periodo», destacó.
Carnicerías: alerta por la baja de las ventas
En tanto, desde las carnicerías de barrio alertan sobre la difícil situación que atraviesa el consumo de carne por la retracción que lo afecta desde hace meses debido a los altos precios que alcanzó el producto.
«La realidad es que la gente ya no puede comprar», se quejó Alberto Williams, titular de la Asociación de Propietarios de Carnicerías para quien «un kilo de milanesa de nalga a $1500 no está al alcance de la gente».
«Eso es lo que vivimos todos los días en las carnicerías de barrio y no sabemos dónde va a terminar esta situación, con valores como el del asado a $1200, lo que significa que una familia tiene que gastar de mínima $2800 para hacer un asado», indicó.
Según el dirigente carnicero los cortes populares, como el asado y el vacío, se han encarecido demasiado y la gente ya no los lleva. «Vemos para colmo que la carne de feed lot viene con mucha grasa. Es decir, para el productor es fácil echarle kilos al animal pero después no se vende porque la gente no es zonza», indicó Williams.
Por su parte, desde la Cámara de Matarifes y Abastecedores (Camya) advirtieron que por los cambios en el sistema de producción habrá un incremento de entre 20 y 25 por ciento en el precio de la carne.
Esto se deriva de la nueva modalidad de comercialización de la carne que está por entrar en vigencia y que dispone que el cuarteo reemplace a la clásica media res.
A partir del 1 de noviembre la carne comenzará a venderse por cortes de no más de 32 kilos, con el objetivo de evitar que los trabajadores del sector sufran lesiones por el peso excesivo que deben transportar.
Sin embargo, Camya cuestionó esta modalidad al señalar que si bien está a favor de cualquier norma que garantice la seguridad de los trabajadores, la «mayoría de los frigoríficos no cuentan con la infraestructura y no han realizado las inversiones necesarias para poder dar cumplimiento a las medidas».
Inflación de tres dígitos
Al analizar este escenario, la consultora LCG señaló que «la inflación parece no ceder y se encamina a cerrar el año en los tres dígitos. La expectativa de que la misma desacelere en el último trimestre del año se evapora cuando se leen los indicadores de inflación de alta frecuencia».
«Sobre esto hay que sumar las presiones adicionales que implican los acuerdos de paritarias, el postergado aumento de la energía y de algunos otros precios regulados como el combustible», advirtió el informe.
Producto de un aumento de precios del 2,2% promedio en las dos primeras semanas del mes, ya se acumula un incremento del 4,5% en el período, incluso por encima de lo observado en las mismas semanas del mes de julio (4% acumulado en dos semanas). (https://www.diariopopular.com.ar/)