La nueva ministra de Trabajo de la Nación, Raquel “Kelly” Kismer de Olmos, se manifestó este jueves en contra de la implementación de bloqueos a empresas como medidas de fuerza, sostuvo que son “instancias violenta” y que no pueden ser “un método ordinario”, al tiempo que habló sobre la necesidad de aumentar el salario mínimo.
“Me parece que el bloqueo es una instancia que resulta violenta y que no puede ser algo ordinario”, sostuvo consultada al respecto en radio El Destape, donde también se refirió a la necesidad de aumentar el salario mínimo y sobre cuándo se reunirá para tratar ese tema. “Tiene que ser en noviembre, dentro de la primera quincena, en noviembre tiene que convocarse al Consejo del Salario Mínimo, y deberá incrementarse”, sostuvo.
Según la última actualización, el monto del Salario Mínimo Vital y Móvil asciende a $54.550. En ese sentido, manifestó que “la posición del Ministerio de Trabajo está con los trabajadores”, y que en particular el tema del salario mínimo “impacta de sobremanera en los más postergados, en los trabajadores informales”.
Asimismo, indicó que lo importante es “quebrar la inflación” porque si no “los trabajadores siempre van a perder”.
Más tarde, se le preguntó sobre la posición del Gobierno con respecto a los acuerdos paritarios que ocasionaron paros y reclamos desde distintos sectores en los últimos meses, como el caso de Neumáticos, Camioneros, controladores aéreos y el abastecimiento de garrafas. Olmos señaló que el Ministerio busca “apoyar que el acuerdo recupere capacidad adquisitiva, y se pueda también ganar algún punto”.
Sobre los pedidos de paritarias de 120% o 130% dijo: “Lo que no podemos es generar un nivel de ajuste que también sea excesivo en el impacto de la reproducción del costo de vida. Puede ser justo para los trabajadores de ese sector, y uno no puede decir si es justo o no porque todo a lo que puede acceder un trabajador se lo merece y más también. El tema es que dada la heterogeneidad, hay sectores que avanzan sobre la dinámica inflacionaria tienen que entender que no es solidario con los que quedan atrás”.
Por lo tanto agregó que “hay que encuadrar todo en una posibilidad en las que los trabajadores puedan recuperar derechos y tener una vida digna, pero en un marco en donde el bienestar general esté presente. Todos tenemos que ser responsables de cuál es la construcción que estamos haciendo”.
“Mi opinión es que los trabajadores y los empresarios tienen que negociar”, señaló. “Las paritarias son algo que el peronista reivindica. Siempre respetamos esa institución en los peores escenarios, pero cuando esas situaciones entran en una tensión que excede la paz social tenemos instrumentos como la conciliación obligatoria y la capacidad de diálogo para resolverlos”. (DIB)