Un insólito caso se dio en Inglaterra cuando una mujer rompió bolsa en un taxi y, tras dar a luz, le llegó una factura con los gastos de la limpieza del auto. Por el momento, la empresa de taxis se ha negado a realizar cualquier tipo de declaración al respecto.
Por el aseo, la empresa de taxis le cobró a la mujer una tarifa extra de 30 libras. Todo comenzó por una revisión rutinaria de embarazo, cuando Farah Cacanindin tuvo un giro de 180 grados en su vida. Al subirse al vehículo, a la joven se le adelantó el parto en el trayecto que tenía planeado de 20 kilómetros de distancia.
Naia, su hija, nació en perfectas condiciones, a pesar de que la mujer se encargó de todo el proceso por sí misma mientras el taxista se encargaba de llamar al personal del Hospital Stoke Mandeville situado en Aylesbury.
Así, la joven de 26 años no solo tuvo que vivir una aventura para dar a luz, sino que lo insólito fue lo que pasó después. A la hora de pagar la tarifa, la empresa inglesa Arrow Taxis no solo le cobró 60 esterlinas el viaje, sino que 30 libras esterlinas se sumaban a la cuenta por la limpieza del coche.