Un auto conducido por un hombre alcoholizado, protagonizó un choque cuando se incrustó en un kiosco en la interseccion de las calles Castro Barros y Av Belgrano de la ciudad de Buenos Aires.
Sólo un verdadero milagro evitó que se produjeron víctimas, ya que el conductor (con 2.2 grs de alcohol en sangre), el comerciante y un cliente resultaron ilesos,gracias a sus reflejos y circunstancias fortuitas.
La cantidad de alcohol por litro en sangre que se le halló luego del test al conductor del automóvil fue más de tres veces lo permitido para un conductor particular, que aún es de 0,50 gr/l.
Con el resultado del test se ordenó el secuestro del auto y de la licencia de conducir del imputado. (https://infocielo.com/)