El presidente Alberto Fernández inauguró la Cumbre de presidentes de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños con un fuerte discurso contra la derecha, que la calificó como «recalcitrante», y llamó a «garantizar y fortalecer» la institucionalidad de la región. Además, aseguró que tanto Venezuela como Cuba son víctimas de un bloque desde hace «décadas».
Tras recibir a los mandatarios, Fernández inició su discurso haciendo un balance de la presidencia pro tempore que ejerció durante el 2022, al que tildó de año «difícil». Asimismo, sostuvo que llevó la voz de América Latina «a todos los rincones del mundo» y agregó: «Nos hicimos escuchar ante los problemas que estamos enfrentando».
Después de la breve introducción y ante la atenta mirada de Luiz Inácio «Lula» da Silva, presidente de Brasil, el jefe de Estado argentino pidió un aplauso por el retorno del gigante sudamericano a la CELAC, que durante la gestión de Jair Bolsonaro estuvo fuera del foro internacional que agrupa a 33 países: «Una CELAC sin Brasil es una CELAC vacía”.
En esa línea, apuntó contra los grupos y gobiernos de derecha, en crecimiento en la región y el mundo: «Tenemos que trabajar para garantizar y fortalecer la institucionalidad de nuestra región. Creemos que la democracia que está en riesgo. Después de la pandemia hemos visto cómo los sectores de la ultraderecha amenaza a nuestros pueblos».
A su vez, agregó: «No podemos permitir que la derecha recalcitrante y fascista ponga en riesgo la institucionalidad de nuestro pueblo. Lo vimos en Bolivia, hace pocos días, cuando la locura pobló las calles de Brasilia y acá en la Argentina cuando alguien intentó matar a nuestra vicepresidenta (Cristina Kirchner)».
De lleno en las problemáticas de regionales, el ex jefe de gabinete de Néstor y Cristina Kirchner indicó que América es el continente más desigual del mundo y aseguró que, junto a sus pares, deben «encarar un proceso que nos lleve hacia la desigualdad y la justicia social en nuestras naciones». «Tenemos que trabajar unidos en un mundo en el que la globalización existe”, señaló.
Con al presencia del presidente cubano Miguel Díaz-Canel y la presencia del canciller venezolano, Carlos Faría, Fernández cuestionó el bloqueo que -en su parecer- padecen ambas naciones: “Fui a la Cumbre de las Américas para llevar la voz de los bloqueos que países latinoamericanos padecen. Son métodos perversos que afectan a los pueblos. Cuba padece un bloqueo de seis décadas y Venezuela otro tanto”.
Para finalizar, el presidente argentino argumentó: «Tenemos que convertir todos nuestros deseos en instituciones y hechos. Tenemos que hacer que la integración sea una realidad, sean acciones que nos permitan avanzar y progresar. Los impulso a que de una vez por todas entendamos que solos valemos poco, que unidos podemos tener una fuerza arrolladora y que ha llegado el momento del Caribe y América Latina una sola región, que defienda los mismos intereses para el progreso de nuestros pueblos».
Escrito por Gonzalo Delmonte
NA – Buenos Aires, Argentina