Milei defendió el veto a la ley de emergencia en discapacidad y anunció un proyecto para sancionar presupuestos con déficit
En una cadena nacional cargada de definiciones económicas y políticas, el presidente Javier Milei justificó anoche su decisión de vetar la ley que declaraba la emergencia en discapacidad, aprobada por el Congreso con el objetivo de recomponer las prestaciones de la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS). El mandatario argumentó que la norma “ponía en riesgo el equilibrio fiscal” y reafirmó que su gestión “no tomará atajos ni hará gradualismo” en el ajuste.
La transmisión, convocada por el vocero presidencial Manuel Adorni, se produjo en un contexto de creciente tensión con el Parlamento y movilizaciones de organizaciones que reclaman la restitución de pensiones suspendidas. Según datos oficiales, la ANDIS dio de baja más de 110 mil beneficios por invalidez —además de bajas por fallecimiento y renuncias— y denunció un “sistema corrupto” que habría desviado fondos por unos US$ 1.000 millones anuales.
“La inflación va camino a desaparecer”
Milei aseguró que, tras un año y medio de gestión, “la inflación pasó de un 300% interanual a 25%” y que el índice “desaparecerá para mediados del año que viene” gracias al control estricto de la base monetaria. Afirmó que su programa económico ya “sacó de la pobreza a más de 12 millones de personas” y redujo la indigencia del 20,2% al 7,3%.
En tono confrontativo, acusó al Congreso de impulsar leyes “para destruir el superávit fiscal” como la moratoria previsional, el aumento del salario docente y las mejoras en las prestaciones por discapacidad. Según el Presidente, esas medidas implican un gasto adicional equivalente al 2,5% del PBI —“una YPF por año”— y responden a una “estrategia de poder” más que a un interés genuino por mejorar ingresos de sectores vulnerables.
Ataque al gasto público y a la emisión
El mandatario reiteró que “aumentar el gasto es destructivo” porque conduce a emisión monetaria e inflación, fenómeno que —dijo— “roba poder adquisitivo a los más pobres” y cuyos efectos se perciben con un rezago de hasta dos años. También cuestionó la idea de que el tipo de cambio sea un motor permanente de precios: “La única relación causal es entre cantidad de dinero y nivel de precios”.
Proyecto para sancionar a legisladores
En el tramo final, Milei anunció dos medidas clave para “blindar el déficit cero”:
- Instrucción al Tesoro para prohibir el financiamiento del gasto primario con emisión monetaria.
- Proyecto de ley para penalizar a legisladores y funcionarios que aprueben presupuestos con déficit, estableciendo una regla fiscal de equilibrio o superávit y sanciones penales para quienes la incumplan.
“Cada peso nuevo que quieran gastar tiene que tener un nombre y apellido; tienen que decir de dónde sale y a quién se lo sacan”, advirtió.