Ni el aguinaldo logró revertir la tendencia: las ventas minoristas de las pymes volvieron a caer en julio y crece el pesimismo
La Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) difundió su informe mensual sobre ventas minoristas de pymes correspondiente a julio y el panorama es preocupante: la caída del consumo ya se presenta como un fenómeno consolidado y en aceleración. Algunos rubros lograron mantenerse a flote, pero ni el cobro del aguinaldo alcanzó para revertir la tendencia.
Según el relevamiento, las ventas minoristas a precios constantes bajaron un 2% interanual y retrocedieron 5,7% frente a junio. En lo que va de 2025, el índice acumula una suba del 7,6% interanual.
Desde la entidad explicaron que el desempeño del comercio estuvo condicionado por “factores económicos que limitaron el consumo”, como el endeudamiento de los hogares, el uso restringido del crédito y el aumento de los costos operativos. Pese a que los locales apelaron a promociones, cuotas sin interés y descuentos, la demanda se concentró en productos de primera necesidad y compras planificadas de bajo monto. Hubo un repunte puntual por el aguinaldo y el turismo invernal, pero sin alterar la tendencia general.
Rendimiento por rubro
Alimentos y bebidas
El sector se mantuvo en alza gracias a la demanda de productos básicos y de estación. El invierno impulsó ciertos consumos, aunque la pérdida de poder adquisitivo siguió limitando el gasto. Las promociones y descuentos fueron claves para sostener el movimiento.
Bazar, decoración, textiles de hogar y muebles
Mostró un leve repunte, sobre todo en artículos pequeños para el hogar. El aguinaldo y el turismo interior dieron un impulso, aunque insuficiente para revertir la caída acumulada. En muebles, el consumo se mantuvo retraído y dependiente de la financiación.
Calzado y marroquinería
Las vacaciones de invierno y las liquidaciones ayudaron a mover el sector, pero el bajo poder adquisitivo y el aumento de costos limitaron el impacto positivo del aguinaldo y de bonos provinciales.
Farmacia
La demanda se mantuvo estable por enfermedades estacionales, con foco en medicamentos esenciales y genéricos. Los costos en alza y el bajo circulante afectaron la rentabilidad.
Perfumería
El Día del Padre y el receso invernal generaron un repunte puntual, pero las ventas generales siguen bajas. La prioridad de los hogares en alimentos relegó estos productos.
Ferretería, materiales eléctricos y de la construcción
La actividad se mantuvo débil por la caída del poder adquisitivo, el endeudamiento y los altos costos. Las ventas se concentraron en productos básicos y reparaciones menores.
Textil e indumentaria
Sufrió otra baja interanual. Las promociones y cuotas sin interés no lograron compensar la menor demanda, afectada por la pérdida de poder adquisitivo, la morosidad y la competencia de plataformas internacionales más baratas.