Un informe del Ministerio de Economía admite la crítica situación financiera que denuncia Kicillof
En su intento por exhibir a las provincias como “degeneradas fiscales”, el Ministerio de Economía de la Nación publicó un mapa fiscal provincial con información detallada sobre gastos, deuda y recursos de cada distrito, actualizada al segundo trimestre de 2025. El documento, elaborado por la Secretaría de Hacienda, terminó revelando —de manera implícita— la asfixia financiera que la administración bonaerense viene denunciando hace meses.
Un déficit récord en Buenos Aires
Según el informe oficial, la Provincia de Buenos Aires registró un déficit financiero de $902.431 millones en el segundo trimestre del año. El dato contrasta con los $127.480 millones del mismo período de 2024, lo que representa un deterioro del 607,9% interanual. Apenas dos años atrás, a mediados de 2023 —antes del cambio de gobierno nacional—, los números mostraban un superávit de alrededor de $25.000 millones.
El deterioro, según los propios datos de Nación, se explica por una caída real del 10% en la Coparticipación Federal de Impuestos. En el primer semestre de 2025, la Provincia recibió $4,2 billones, lo que implica $474.400 millones menos que en el mismo período del año anterior.
Menos ingresos y más presión fiscal
El reporte también expone la magnitud del endeudamiento provincial: la deuda total asciende a $12,1 billones, y el gobierno de Axel Kicillof ya presentó varias demandas ante la Corte Suprema para recuperar fondos que considera retenidos de manera ilegítima. En paralelo, el Ejecutivo bonaerense envió a la Legislatura un proyecto de ley de financiamiento para sostener el gasto público sin tomar nueva deuda, aunque su tratamiento sigue demorado.
Nación niega, pero sus números la contradicen
Mientras tanto, la Casa Rosada insiste en que no existen atrasos ni retenciones de fondos hacia Buenos Aires. Así lo aseguró el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, en su último informe ante la Cámara de Diputados, donde negó “compromisos pendientes o demoras en los pagos” hacia la administración provincial.
Sin embargo, el mapa fiscal del propio Ministerio de Economía parece contradecir esa versión: muestra una caída sostenida de los recursos transferidos y un déficit creciente que golpea a la provincia más poblada del país.
La publicación, pensada como una herramienta para exponer desequilibrios fiscales, terminó dando argumentos a Kicillof, quien desde hace meses denuncia un ahogo financiero deliberado por parte del Gobierno nacional.