La era de la flexibilidad en Google sigue reduciéndose. La compañía ha decidido restringir aún más su programa “Work from Anywhere”, la política que permitía a los empleados trabajar hasta cuatro semanas al año desde cualquier parte del mundo.
Según documentos internos filtrados a CNBC, un solo día de trabajo remoto fuera del domicilio principal contará ahora como toda una semana completa, reduciendo drásticamente las opciones de quienes buscaban mantener cierta libertad geográfica.
Menos libertad para los empleados: así cambia la política
Hasta ahora, los trabajadores podían aprovechar cuatro semanas al año para desempeñar sus tareas desde otra ciudad o país.
Con la nueva norma, si un empleado trabaja solo un día remoto durante una semana, Google restará una semana completa de su saldo anual de “Work from Anywhere”.
En palabras del documento filtrado:
“Tanto si registra un día de teletrabajo como cinco en una semana laboral estándar, se deducirá una semana completa de su saldo”.
Esta modificación reduce considerablemente la flexibilidad del plan, que había sido una de las ventajas más valoradas por los empleados desde la pandemia.
La cruzada de Google contra la flexibilidad laboral
El cambio no sorprende. Desde hace más de un año, Google ha endurecido su política híbrida y presiona a los trabajadores para regresar a las oficinas.
En abril, empleados de varias divisiones recibieron un ultimátum: asistir al menos tres días por semana o arriesgar su puesto de trabajo.
La empresa justifica estas decisiones con el argumento de que la colaboración presencial impulsa la innovación y la resolución de problemas complejos.
Sin embargo, este discurso contrasta con estudios recientes que muestran que el teletrabajo aumenta la productividad y el bienestar, especialmente en tareas técnicas y creativas.
“Work from Anywhere” no es “trabajar desde casa”
Es importante destacar que esta medida no afecta al horario híbrido habitual de Google —que permite trabajar dos días por semana desde casa—, sino a la posibilidad de trabajar desde otra ubicación completamente distinta al domicilio habitual.
La compañía aclara que las semanas de trabajo remoto no pueden utilizarse para trabajar desde casa ni en zonas cercanas, sino que están pensadas para empleados que se trasladan temporalmente a otro lugar, incluso fuera del país.
Pero esa flexibilidad también tiene límites:
- No se podrá trabajar desde otra oficina de Google en otro estado o país sin autorización especial.
- Los empleados deberán respetar los horarios de la zona horaria en la que estén trabajando.
- Las infracciones a esta política podrían derivar en sanciones disciplinarias o despidos.
El giro cultural de Google: de empresa soñada a control corporativo
Google, que durante años fue considerada el mejor lugar para trabajar en Silicon Valley, atraviesa un cambio profundo en su cultura interna.
Los recortes de personal, las condiciones más rígidas y las nuevas políticas laborales están transformando el espíritu que alguna vez definió a la compañía.
Incluso el ex CEO de Google ha reconocido que la gente es “más productiva en teletrabajo”, aunque defiende la oficina por los supuestos beneficios de “interacción y bienestar”.
Mientras tanto, la distancia entre los empleados y la dirección se amplía, y la empresa que alguna vez simbolizó la innovación laboral parece ahora más preocupada por recuperar el control perdido durante la pandemia.
Google fue pionera en el trabajo flexible. Pero con estas restricciones, la pregunta es inevitable:
¿se puede seguir innovando en un entorno donde cada día fuera de la oficina cuenta como una falta?
Redacción del equipo de tecnología del Norte Bonaerense




