Un modelo modificado de Gemini será el nuevo “cerebro” del asistente de Apple, que debutará en 2026
La inteligencia artificial se ha convertido en el talón de Aquiles de Apple. Mientras sus competidores avanzan en asistentes más fluidos y autónomos, la compañía de Cupertino todavía batalla con una Siri que no logra responder con la calidad que exige el mercado actual. Pero el panorama está por cambiar.
Según reveló Bloomberg, Apple está ultimando un acuerdo histórico con Google para usar una versión personalizada de Gemini, su modelo de IA más avanzado, como motor principal de la nueva Siri.
Esta alianza sorprende, pero también evidencia algo: Apple necesita un salto inmediato. Y Google está dispuesto a dárselo.
Siri 2026: un salto hacia la “IA agéntica”
La Siri actual funciona como un “ejecutor de comandos”: recibe órdenes muy específicas y responde dentro de un marco rígido.
La nueva Siri, en cambio, apunta a operar bajo un modelo de intención con múltiples pasos, capaz de entender contexto, tomar decisiones y ejecutar acciones complejas.
Ejemplo clásico:
“Siri, mi reunión terminó antes. Revisá mi calendario y mi correo para adelantar la comida. Si no se puede, buscá un café cercano bien puntuado antes de mi reunión de las 3 p.m. y pedí un coche para ir.”
Este tipo de órdenes requieren procesar datos, cruzar apps, interpretar escenarios y actuar en nombre del usuario: la esencia de una IA agéntica, una tendencia que domina el futuro del software.
El problema de Apple: modelos pequeños, ambiciones gigantes
Apple presentó su estrategia de “Apple Intelligence” en 2024, con funciones útiles —resúmenes, automatización, integración con ChatGPT—, pero su modelo propio resultó demasiado limitado para sostener una Siri avanzada.
Los modelos internos de Apple son, en promedio, ocho veces más pequeños que el nuevo modelo Gemini que Google adaptará para Cupertino. Y en IA, el tamaño sí importa: determina profundidad, contexto y precisión.
Frente al retraso, Apple evaluó dos alternativas externas:
- Gemini (Google)
- Claude (Anthropic)
Y terminó eligiendo a Google, en parte por su larga relación en el negocio de búsquedas.
Un acuerdo millonario… pero separado del contrato de búsquedas
Google paga a Apple cerca de 20.000 millones de dólares al año para ser el buscador predeterminado en el iPhone.
Ahora, Apple pagará 1.000 millones a Google por este modelo Gemini personalizado.
Bloomberg y Reuters aclaran que ambos acuerdos son independientes. Apple no quiere integrar la IA de Google dentro de iOS o macOS; sabe que los reguladores ya están atentos a cualquier señal de monopolio o dependencia tecnológica.
En paralelo, Apple mantendrá la opción de usar ChatGPT u otros modelos —como Grok— de forma integrada en sus sistemas.
Cómo funcionará Gemini dentro de la nueva Siri
Lo más interesante es que el modelo no correrá en servidores de Google, sino en la infraestructura de Private Cloud Compute, los centros de datos propios de Apple diseñados para procesar solicitudes cifradas y verificables.
Este diseño garantiza que:
- Google no accede a los datos
- Terceros no acceden a los datos
- Ni siquiera Apple puede ver información personal
Dentro del proyecto interno “Glenwood”, la parte de Gemini será clave en dos funciones críticas:
1. Planificador de consultas
Define los pasos necesarios para resolver pedidos complejos, desde abrir apps hasta cruzar datos del calendario y el correo.
2. Sistema de resúmenes
Condensa correos, notificaciones, páginas web y hasta notas de voz en versiones claras y rápidas de leer.
El resto del trabajo seguirá a cargo de modelos propios de Apple, más pequeños y especializados.
Apple quiere ser autosuficiente en 2 o 3 años
El objetivo final es claro: reemplazar a Gemini por modelos fundacionales 100% desarrollados por Apple.
Algo similar a lo que ocurrió con los mapas del iPhone: al principio dependían de Google, pero la empresa construyó su propio sistema desde 2012.
Hasta entonces, la alianza con Google será el puente que permitirá que Siri deje de ser “un contestador avanzado” y se convierta, al fin, en un verdadero asistente inteligente.




