La histórica estación de trenes de nuestra Ciudad se encuentra en muy mal estado, y los usuarios solicitaron una pronta intervención para revertir esta situación.
Al parecer, a la falta de mantenimiento habitual se originaron nuevos inconvenientes tras las últimas tormentas. Entre estos, la caída de mampostería.
Dada la situación, una de las escaleras que conecta con el puente peatonal para cruzar del otro lado de las vías, fue clausurado. De esta manera, quienes deban realizar esta acción deberán utilizar la segunda escalera.
Vidrios rotos, falta de iluminación, maderas pudriéndose y el óxido ganando cada pedazo de hierro sin pintar, evidencian la ausencia de inversión en el edificio por el que pasan quienes eligen al ferrocarril como medio de transporte, e incluso, se quedan con esta triste primera impresión al llegar a Campana por esta vía.