Más de 350 kilos de pescado fueron decomisados este lunes por personal de la Prefectura Naval a una organización que se dedicaría a la pesca ilegal en el río Paraná de las Palmas y que fue interceptada en el puerto de Escobar.
El procedimiento tuvo lugar en horas de la noche, cuando una embarcación amarró en la dársena de la costanera. Sus movimientos resultaron sospechosos para la guardia de Prefectura, que se acercó al lugar para identificar a los ocupantes de la lancha.
El personal que intervino detectó que a bordo de la embarcación había un freezer de grandes proporciones, en cuyo interior se guardaba una importante cantidad de pescados. “Eran unas 200 piezas, entre bogas, patíes y dorados”, expresó a El Día de Escobar una fuente cercana a la causa.
A simple vista, la mercadería no cumplía “ninguna clase de protocolo sanitario” y tampoco se conocía de manera fehaciente su procedencia. Además, la embarcación tampoco tenía documentación, según consignaron voceros del operativo.
Por esta razón también se trasladaron al lugar inspectores del SENASA, agentes de la Dirección de Control e Inspección y preventores comunitarios, quienes junto al personal de Prefectura realizaron el decomiso de la mercadería a fines de trasladarla e incinerarla para evitar el consumo humano. Según estimaciones, se trataría de unos 360 kilos de pescado.
Además, la embarcación fue secuestrada de manera preventiva.
El procedimiento implicó un duro golpe para esta presunta banda dedicada a la pesca ilegal, sobre la cual se venían realizando tareas de inteligencia a fin de evitar la continuidad de su operatoria en aguas del Paraná de las Palmas.
Fuente: El Día de Escobar
